Año del centenario de José María Arguedas

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sábado, 5 de febrero de 2011

Salvador Dalí sobre Gala ...



"Su cuerpo tenía una complexión infantil, sus omóplatos y sus músculos lumbares la tensión de los adolescentes. La curva de la espalda, por el contrario, era extremadamente femenina y unía con gracia el torso enérgico y altivo a las finas nalgas que su talle de avispa hacía todavía más deseable",



"Gala me ha dado, en el verdadero sentido de la palabra, la estructura que faltaba en mi vida. Yo no existía más que en un saco lleno de agujeros, blando y borroso, siempre en busca de una muleta. Ciñéndome a Gala he encontrado una columna vertebral y, haciendo el amor con ella, he rellenado mi piel. Hasta este momento mi esperma se perdía por la masturbación como arrojado a la nada, con Gala lo he recuperado y me ha vivificado. Primero creí que ella iba a devorarme; pero por el contrario, me ha enseñado a comer lo real. Firmando mis cuadros como Gala-Dalí, no hago más que dar nombre a una verdad existencial, porque no existiría sin mi gemela Gala".



"Ella sería mi Gradiva (la que avanza), mi diosa de la Victoria, mi mujer. Para ello era necesario que me curase. Y ello me curó gracias a la potencia indomable e insondable de su amor, en que la profundidad de pensamiento y la destreza práctica rebasaban los métodos psicoanalíticos más ambiciosos".


"Gala me liberó de mi crimen y me curó de mi locura. ¡Gracias! ¡Quiero amarte! Te desposaré. Mis síntomas histéricos desaparecieron uno tras otro como por encantamiento y yo volvía a ser el dueño de mi sonrisa, de mi risa, de mis gestos. Una salud nueva brotaba como una rosa de mi cabeza".


NOTA ESPECIAL : Este post está dedicado para la Gala de Horacio , aquella mujer que llegó a su vida para cambiarla por completo y ser ese elemento que le faltaba para ser enteramente humano. Llegaste para curarlo y colmar su universo de ternura, de hijos futuribles e imaginarios ; de uniones soñadas: de espejos empañados por sus alientos en habitaciones inundadas de amor de rincón a rincón; de sueños tan cercanos y complejos.Ahora solo toma su mano y míralo a los ojos, y muéstrale que el futuro está muy cerca.

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